Las agencias Fitch y Moody’s redujeron la calificación crediticia de Rusia a ‘basura’ o país en riesgo de no poder pagar su deuda, a medida que aumenta el riesgo de que las sanciones internacionales impuestas en respuesta a la invasión de Ucrania por parte del país puedan socavar su capacidad y disposición para pagar la deuda.
Moody’s rebajó su nota de deuda rusa de largo plazo de Baa3 a B3 y dijo que observa las sanciones impuestas por los países occidentales a Rusia.
Por su lado, Fitch la bajó de BBB a B, colocando la calificación en observación negativa, citando el debilitamiento de las finanzas públicas y externas, la desaceleración del crecimiento, el riesgo interno y geopolítico elevado y la posibilidad de nuevas sanciones.
Las sanciones han “aumentado los riesgos de estabilidad macrofinanciera” y representan un gran impacto en los fundamentos crediticios de Rusia, dijo la calificadora en un comunicado.
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Tales calificaciones colocan a la deuda de Rusia en la categoría de inversión especulativa.
La rebaja en varios niveles de la nota de Rusia y el mantenimiento de una vigilancia (…) han sido provocados por la severas sanciones que los países occidentales han impuesto a Rusia”, en especial contra el banco central y las grandes instituciones financieras, en respuesta a la invasión militar a Ucrania
precisa Moody’s en un comunicado.
La agencia de calificación financiera alude a un “creciente riesgo de perturbación” en lo referente a la devolución de la deuda rusa debido a las “sanciones coordinadas” y a las “grandes inquietudes sobre la voluntad de Rusia” de honrar su deuda.
Fitch augura a su vez que habrá sanciones más severas contra los bancos rusos. La agencia afirma que en el caso de que se prolongue el conflicto, en un contexto de frágil crecimiento económico, el riesgo de inestabilidad política será más importante en Rusia.
¿Qué son las calificaciones basura?
De acuerdo con BBVA, los bonos de alto rendimiento son títulos de renta fija de baja calificación crediticia emitidos por una empresa o por un estado. También son conocidos coloquialmente como “bono basura” o ‘high yield’ en inglés.
Su principal característica es que presentan un riesgo elevado de impago tanto del capital como de los intereses aunque, para compensarlo, ofrecen una rentabilidad elevada.
Un bono basura puede ser determinado como tal bien porque sea emitido por un emisor cuyo rating esté situado en el grado especulativo o por su propia estructura. Su calificación crediticia está por debajo de la barrera BBB (Baa, en el caso de Moody’s).
El mercado de bonos basura suele contar con inversionistas especializados (fondos de inversión, seguros, gestores de patrimonio, de inversión alternativa) que buscan un mayor rendimiento a cambio de asumir un mayor riesgo.
Muchos de los inversionistas “tradicionales” tienen prohibido invertir en activos cuyo rating sea inferior a uno concreto.
Rublo se hunde
El rublo se hundió a un mínimo histórico frente al dólar en las operaciones intradía en Moscú, después de que las agencias redujeron la calificación crediticia de Rusia hasta el nivel de basura.
De acuerdo con Bloomberg, el rublo retrocedió hasta 10% a 118,35 por dólar antes de borrar las pérdidas al cierre de Moscú. En operaciones extraterritoriales, el rublo bajó 2.3 % a 104,7787.
Las sanciones internacionales en respuesta al ataque de Rusia a Ucrania han obligado al banco central a imponer controles de capital y cerrar temporalmente los mercados de acciones y bonos del país. Solo el comercio de divisas continúa en una sesión diaria más corta.
Estos movimientos de calificación de Fitchy Moody’s compensaron cualquier apoyo para la moneda de un nuevo requisito del banco central de que los corredores cobren una comisión del 30% sobre las compras de moneda fuerte por parte de individuos.
Además, la medida, informada por Interfax, tiene como objetivo “igualar las condiciones competitivas entre bancos y corredores”, informó el servicio de noticias.
“La rebaja de las calificaciones aumentó la presión sobre los activos rusos y, como resultado, las nuevas medidas del banco central no han tenido un gran impacto en el tipo de cambio hasta ahora”, dijo a Bloomberg Viktor Grigoriev, analista de Bank St. Petersburg.
“El rublo podría hundirse aún más a 120 por dólar”, agregó.
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*Con información de Bloomberg y AFP