Los funcionarios de la Reserva Federal (Fed, por sus siglas en inglés) acordaron que es necesario elevar la tasa de interés a un nivel más restrictivo y mantenerla de esa forma durante un tiempo, con el objetivo de reducir la inflación de Estados Unidos. 

Sin embargo, acotaron que ante esta decisión es de suma importancia calibrar las alzas para que, de esa manera, mitigar los riesgos.

Varios participantes señalaron que, particularmente en el actual entorno económico y financiero global altamente incierto, sería importante calibrar el ritmo de un mayor endurecimiento de las políticas, con el objetivo de mitigar el riesgo de efectos adversos significativos en las perspectivas económicas

según las minutas publicadas este miércoles en Washington.

Los banqueros centrales de Estados Unidos acordaron incrementar la tasa de interés de referencia en 75 puntos base por tercera vez consecutiva, llevándola a un rango objetivo de 3% a 3.25%. 

De acuerdo con las minutas de las reuniones del 20 y 21 de septiembre, varios funcionarios del banco central enfatizaron que “el costo de tomar pocas medidas para reducir la inflación probablemente superó el costo de tomar demasiadas medidas”.

Esta apuesta, además de los diferentes pronunciamientos de diversos miembros de la Fed sobre tomar una postura más agresiva en la lucha por contener la inflación, llevan a los operadores a apostar por que la Fed volverá a subir la tasa de interés en 75 puntos base el próximo mes.

La Fed sigue decidida a endurecer aún más la política monetaria en territorio restrictivo dado el enfriamiento bastante gradual de la actividad económica y la lenta respuesta de la inflación

comentó Gregory Daco, economista jefe de Ernst & Young LLP.

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Inflación vs mercados

Durante agosto, la inflación de Estados Unidos aceleró a 8.3% en su comparación anual, situación que significó hilar dos meses consecutivos con reducciones, luego de que en julio se ubicó en 8.5% y durante junio en 9.1%.

Este jueves se presentarán los resultados de septiembre, situación que tiene expectantes a los mercados que han sufrido ante el temor de una recesión por las constantes alzas de la tasa de interés por parte de la Fed para contener la inflación.

Pese a que los inversionistas se han mostrado cautelosos por el riesgo que existe de contar con menos ganancias, lo que se ha visto reflejado en seis jornadas en rojo por parte de los principales índices de Wall Street, directivos del banco central han minimizado estos daños priorizando su política antiinflacionaria.

A finales del mes pasado, el presidente de la Fed de Atlanta, Raphael Bostic, desdeñó la volatilidad mostrada por los mercados y la venta masiva de acciones realizada por los inversionistas estadounidenses.  

No sé si son demasiado optimistas o no lo suficientemente optimistas (…) Lo más importante es que necesitamos controlar la inflación

señaló Bostic en un evento organizado por el periódico The Washington Post. 

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Con información de Bloomberg y Reuters