La economía nacional pudo mostrar un mayor dinamismo durante 2022 que diera pie a un nuevo mexican moment y la entrada de nuevas inversiones, de acuerdo con Grupo Financiero Base.

El año pasado, el Producto Interno Bruto del País (PIB) registró un crecimiento de 3% a tasa anual, de acuerdo con el dato preliminar divulgado este martes por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Gabriela Siller, directora de análisis económico de Banco Base, subrayó que la economía mexicana pudo crecer hasta 4%, pero se perdió la oportunidad de aprovechar el nearshoring o relocalización de cadenas de suministro.

Las empresas buscan sustituir la producción en China para exportar a Estados Unidos, ante los altos gastos logísticos y la guerra comercial entre ambos países, lo que colocó a México en un lugar privilegiado por su geografía.

Sin embargo, hasta ahora la cantidad de compañías que llegan al país no es tan elevada y las perspectivas apuntan a que el boom del nearshoring se va a diluir en 2023 porque los costos van a disminuir.

Se podía haber logrado mucho más con el nearshoring. México tiene un tratado comercial (TMEC), si aprovechamos esta oportunidad veríamos una oleada de inversión, sería un verdadero momento mexicano

dijo la economista en conferencia de prensa con medios.

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Inversión, con rezagos

El crecimiento de la economía mexicana fue favorecido por la entrada histórica de remesas y el crecimiento del consumo privado; sin embargo, hay un rezago de la Inversión Fija Bruta derivado de un problema estructural.

Históricamente el indicador de inversión mantiene una correlación importante con el crecimiento del PIB, pero en los últimos años se ha desligado y comenzó una tendencia bajista.

La pérdida de confianza ha sido una constante en el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, desde el anuncio de la cancelación de la construcción del  Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAIM) en 2018.

No hay suficiente nivel de inversión en México. De 2010 a 2018 estuvo estancada y a partir de 2019 empezamos a ver una disminución, es decir, falta de confianza sobre México para invertir

explicó Siller.

Otro factor que ha impedido una mayor expansión de la economía está relacionado con el alto nivel de empleo informal que corresponde a 55% de la población ocupada en el país.

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¿Qué se anticipa para 2023?

En su comparación anual, la economía nacional no se ha recuperado de la caída de 2020 tras los cierres por la emergencia sanitaria y sigue por debajo de los niveles de 2018 y 2019.

Para 2023, Banco Base estima un crecimiento del PIB de 1.73% en un escenario central, que dependerá de que una anticipada recesión en Estados Unidos tenga un impacto moderado.

En un escenario más pesimista, la economía tendrá una contracción de 0.71% si la recesión en el país vecino es más profunda de lo esperado. 

Mientras que en un contexto más alentador si se aprovecha el nearshoring, pero que es poco probable, México tendría una expansión de 3.02%.

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