La confianza empresarial del país continuó en marzo pasado con su buena racha, apoyada por menores presiones inflacionarias, el auge del nearshoring y la fortaleza del peso.

De acuerdo con datos desestacionalizados de la Encuesta Mensual de Opinión Empresarial (EMOE), el Indicador de Confianza Empresarial (ICE) general se ubicó en 52.88 puntos en el tercer mes del 2023.

ICE

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Este nivel, además de significar el mayor en los últimos diez meses, representó un crecimiento mensual de 3.76%, la segunda alza al hilo.

En general, las perspectivas para la inversión han mejorado. Creemos que algunos de los factores que han apuntalado al sector siguen presentes, destacando entre ellos al nearshoring

reporta Banorte.

Crecen todos los sectores

Los sectores económicos que considera el ICE son manufactura, construcción, comercio y servicios.

Los aumentos en marzo del 2023 se presentaron en todos los sectores, destacando los correspondientes al consumo privado: servicios privados no financieros (7.06% mensual) y comercio (1.01%). Esto manda señales de una mayor fortaleza en la demanda interna, considerando la desaceleración de la inflación.

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En ambos casos, todos sus componentes incrementaron. El mayor ascenso se dio en la situación económica presente de la empresa del país, 18.88% en servicios y 6.49% en comercio.

Es decir, el mayor optimismo del empresariado de los sectores terciarios se depositó en la actualidad económica en México.

El grupo financiero señala que para las manufacturas resalta señales más favorables desde Estados Unidos, aunque con ciertos retos locales, mientras para los otros sectores observa sólidos para el consumo y mejorías en el frente de precios apoyarían una mayor expansión.

Se mantienen alertas

No obstante, se mantienen alertas por el incremento reciente en la incertidumbre y las altas tasas de interés, resultando en mayores expectativas de una recesión.

Los recientes problemas en el sector bancario de Estados Unidos y las expectativas de un apretamiento monetario adicional de Banxico podrían limitar ganancias adicionales

asegura Banorte.

Otro punto en contra para el sector empresarial del país es que la fortaleza del tipo de cambio podría estar impactando la competitividad de las exportaciones mexicanas.