Durante diciembre, la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami)  aprobó un incremento del 15% al salario mínimo, aplicable a partir del primer día de 2021. 

El incremento está por encima de la inflación, por lo que el sector empresarial alertó sobre posibles complicaciones principalmente a las pequeñas y medianas empresas. 

La preocupación sobre el incremento también ha llevado a la discusión sobre el impacto que podría tener sobre el precio de los créditos hipotecarios, principalmente los que están denominados en Veces Salarios Mínimos, algo que el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores ya descartó.  

 Desde 2016, con el objetivo de reducir el impacto del aumento salarial sobre el saldo de los créditos denominados en VSM, el Infonavit ajusta el pago mensual de los acreditados y el saldo de dichos financiamientos conforme al menor de los incrementos entre el Salario Mínimo y la Unidad de Medida y Actualización (UMA) ,

indicó el instituto en un comunicado.

Para 2021, el INEGI determinó el valor diario de la UMA en 89.62 pesos, es decir que si habrá incremento, pero será del 3.15% y no 15% como el salario mínimo. 

El Infonavit también destacó la existencia del programa Responsabilidad Compartida, que permite convertir los créditos denominados en VSM a pesos, con lo que la mensualidad hipotecaria deja de registrar incrementos anuales.

El instituto considera que, pese a este incremento del 3.5% en los créditos hipotecarios, el aumento al salario mínimo es beneficioso dado que representa una mayor contribución por parte de los patrones a las Subcuentas de Vivienda “lo que incrementa el ahorro de los derechohabientes que todavía no acceden a un crédito, permitiéndoles obtener un mayor monto de financiamiento”.