El huracán John mantiene alerta a las autoridades mexicanas mientras se desplaza por el Pacífico mexicano hacia las costas de Michoacán; por su parte Helen, que se encuentra en el Golfo de México, ya apunta hacia la península de Florida. 

A través de un comunicado conjunto, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y el Sistema Meteorológico Nacional (SMN), informaron que el fenómeno hídrico se encuentra a unos 75 kilómetros al sureste de Lázaro Cárdenas, Michoacán, y 245 kilómetros al sureste de Manzanillo, Colima

De acuerdo con las autoridades, el huracán John estará tocando tierra esta noche y en las primeras horas del viernes en los municipios de Aquila, Michoacán, y Tecomán, Colima.

El ciclón también seguirá provocando lluvias de diferentes niveles en algunas otras entidades. Para Colima, Michoacán y Guerrero serán puntuales extraordinarias; mientras en Oaxaca serán torrenciales; en Chiapas, Jalisco, Puebla y Veracruz se esperan lluvias intensas y en Tabasco muy fuertes.

En coordinación con el Centro Nacional de Huracanes, de Estados Unidos, las autoridades mexicanas han establecido una zona de vigilancia por efectos de huracán que va desde Punta San Telmo, Michoacán, hasta Manzanillo y se mantiene en zona de prevención desde Tecpan de Galeana, Guerrero, hasta Punta San Telmo. En ambos casos también se mantiene la prevención por efectos de tormenta tropical

¿Cómo se mueve el huracán Helene? 

En el caso de Helene, el fenómeno natural se mantiene en categoría 2 en la escala Saffir-Simpson; sin embargo, se aleja de las costas mexicanas y apunta rumbo a Estados Unidos. Helene está localizado a 405 kilómetros del sureste de Tampa, Florida

Pese a su salida del territorio mexicano, sus bandas nubosas ocasionaron lluvias fuertes y rachas de viento de 50 a 70 kilómetros por hora en entidades como Campeche, Quintana Roo y Yucatán.   

Las precipitaciones producidas por ambos fenómenos generarán descargas eléctricas, rachas de viento e incluso granizo en diversas partes del país. En ciertas zonas las lluvias de mayor intensidad podrían provocar deslaves, incremento en los niveles de ríos y arroyos, llevando así a inundaciones en las zonas bajas de los estados.  

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