Situación económica del país deteriora el optimismo de los mexicanos
En lo que va de 2025, los hogares mexicanos no conocen el sentimiento de optimismo. Esto, derivado principalmente de una mayor preocupación sobre la situación económica del país en el futuro.
Según datos desestacionalizados del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el Indicador de Confianza del Consumidor (ICC) disminuyó 4.7% a tasa anual durante junio pasado.
En primera instancia, representó la sexta caída consecutiva; es decir, en el transcurso de este primer semestre no se han registrado variaciones positivas del indicador.
Además, significó la baja más pronunciada del ICC, que mide la percepción de los consumidores sobre su situación económica actual y la del país, así como sus expectativas, desde noviembre del 2022 (-9.2%).

Fotoarte: EL CEO
Optimismo, desaparecido
De los cinco subíndices que componen el Indicador de Confianza del Consumidor, todos mostraron retrocesos anuales durante el último mes del primer semestre del presente año.
El descenso más pronunciado se dio en la condición económica del país dentro de 12 meses respecto a la actual situación, con una baja de 9.1%, la sexta disminución consecutiva.
También destacó la baja de 8.1% del componente sobre la situación económica actual de México comparada con la de hace 12 meses, con una variación negativa de 8.1%, extendiendo su racha a siete meses con caídas.
Sentimiento de fragilidad
En junio, los resultados de la confianza del consumidor retomaron un profundo sentimiento de fragilidad. Con ello, se prolonga la trayectoria descendente del indicador, reflejando un entorno de cautela entre los hogares.
La mayor merma se observó en las posibilidades de compra de los hogares y en la situación económica del país. A su vez, los indicadores complementarios plasman un mayor pesimismo sobre el mercado laboral, el comportamiento de los precios y la capacidad de ahorro
señala Monex.
Hacia adelante, los especialistas del grupo financiero exponen que el indicador preserva retos importantes, ante los frágiles resultados de los últimos datos económicos y el entorno externo, algunos de estos son:
- Débiles señales de recuperación en sectores clave como las manufacturas y servicios
- Menor impulso en la inversión y el consumo
- Las presiones derivadas de las negociaciones arancelarias entre México y Estados Unidos
Te puede interesar: