Ford México: 100 años de historia e innovación

Todo comenzó en 1925, en un México que apenas comenzaba a reconstruirse tras los estragos de la Revolución Mexicana. Las calles eran pocas y las carreteras aún no existían, pero Henry Ford vio en este país una promesa de futuro.

Fue entonces cuando la compañía estadounidense colocó la primera piedra de lo que se convertiría en la industria automotriz nacional: una planta de ensamblaje en San Lázaro, Ciudad de México, donde cada día 260 trabajadores daban forma al icónico Modelo T.

Desde entonces, Ford no ha dejado de acelerar y no sólo fabrica autos en el país, sino también los diseña, los desarrolla y los comercializa.

Aunque es la única automotriz con un siglo de operaciones ininterrumpidas en México, hoy enfrenta grandes retos provenientes de su país de origen, Estados Unidos: el gobierno del presidente Donald Trump ha establecido una serie de aranceles a los autos fabricados fuera de su territorio, lo cual amenaza la operación de la compañía.

Más que autos: el legado social y tecnológico de Ford

La llegada de Ford a México no solo trajo vehículos; trajo consigo una nueva forma de pensar la producción, la eficiencia y la modernidad. La planta de San Lázaro no fue solo una fábrica, sino un punto de partida para crear una red de distribuidores —muchos de ellos aún activos hoy— y una cultura empresarial basada en el compromiso a largo plazo.

Ford no solo se adaptó a las necesidades del país: las anticipó. A medida que México crecía, también lo hacía su industria automotriz, con Ford al frente de cada transformación.

Durante un siglo, Ford ha construido algo más que vehículos. Ha dejado una huella profunda en la sociedad mexicana a través de múltiples iniciativas:

Educación: más de 200 escuelas Ford se han construido en comunidades de todo el país.
Sustentabilidad: Ford ha puesto en marcha iniciativas en pro del medio ambiente como plantas con procesos de cero descargas, captación de agua pluvial y programas de reforestación.
Innovación: la automotriz impulsa al talento mexicano desarrollando patentes y soluciones tecnológicas que posicionan a México como un centro estratégico para la compañía.
Responsabilidad social: Ford ha promovido actividades como deporte, cultura e integración comunitaria como parte de su misión empresarial.

Un siglo de logros en un contexto desafiante

A pesar de su legado, Ford enfrenta un contexto desafiante. Las políticas comerciales del presidente Donald Trump han impuesto nuevos aranceles del 25% a los vehículos importados desde México, y duplicado los gravámenes al acero y aluminio al 50%.

En respuesta, Ford anunció en marzo el aumento de precios de tres modelos ensamblados en México: el Mustang Mach-E, la pickup Maverick y el Bronco Sport, con incrementos de hasta 2,000 dólares.

Aunque Ford mantiene una ventaja al fabricar el 79% de los vehículos que vende en Estados Unidos dentro del propio país —frente al 53% de General Motors—, la medida afecta especialmente a su modelo más accesible y popular: su pickup Maverick, que se produce en México.

Los efectos ya son visibles: en el primer trimestre de 2025, las exportaciones mexicanas de material de transporte hacia Estados Unidos cayeron 1.4% anual. Si bien los autos aumentaron 5.5%, las autopartes se contrajeron 3.8%. Además, la compañía suspendió su proyección financiera para el resto del año, previendo un impacto arancelario de hasta 2,500 millones de dólares.

El futuro de Ford en México: más ingeniería y flotas comerciales

En medio de este panorama, Ford apuesta por crecer. Como parte de su aniversario número 100, anunció la expansión de su centro de ingeniería en Naucalpan, Estado de México, uno de los más importantes fuera de Estados Unidos.

Además, introducirá en el país Ford Pro, su plataforma integral para atender a flotas comerciales y gubernamentales, con un enfoque en la electrificación, tecnología, servicio posventa y eficiencia operativa.

Nuestras fábricas en México han establecido los estándares de calidad y productividad para Ford. Seguiremos compitiendo con fuerza aquí, fabricando y vendiendo vehículos que los clientes quieran conducir

destacó Jim Farley, CEO global de Ford Motor Company.

Visión ante la electrificación

En la Conferencia Anual de Decisiones Estratégicas Bernstein 2025, Ford delineó su visión futura. Aunque optimista con el crecimiento a largo plazo, la compañía reconoció retos como la desaceleración en la adopción de vehículos eléctricos y la presión de los fabricantes chinos.

John Lawler, vicepresidente de la firma, explicó que Ford está reajustando su estrategia para enfocarse en modelos más pequeños, accesibles y también en tecnologías híbridas. Ford aprovechará la plataforma Ford Pro para impulsar el crecimiento a través de software y servicios.

La estrategia contempla alianzas clave para reducir costos de capital, acelerar la innovación y fortalecer su presencia como fabricante estadounidense ante un escenario comercial incierto.

Un siglo que apenas comienza

Con un pasado lleno de logros y un presente en evolución, Ford mira al futuro con claridad: quiere seguir siendo un pilar de la industria automotriz mexicana, impulsando innovación, tecnología y desarrollo.

Su centenario es el arranque de una nueva era. Porque si la historia de México se cuenta sobre ruedas, muchas de ellas seguirán llevando el óvalo azul.

Con información de Milenio y el Financiero

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