IMSS lanza prueba piloto para asegurar a trabajadores de plataformas como Uber, DiDi y Rappi
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) aprobó un acuerdo que pone en marcha una prueba piloto para incorporar a las personas trabajadoras de plataformas digitales —como repartidores y conductores— al régimen obligatorio del seguro social. La medida entrará en vigor el próximo 1 de julio de 2025.
Durante su sesión ordinaria del 27 de mayo, el Consejo Técnico del IMSS emitió el acuerdo “ACDO.AS2.HCT.270525/132.P.DIR”, el cual aprueba las reglas de carácter general para esta incorporación, en cumplimiento con las reformas a la Ley Federal del Trabajo publicadas en diciembre de 2024.
El objetivo es garantizar que las plataformas digitales cumplan con sus nuevas obligaciones laborales, asegurando a los trabajadores desde su registro en la aplicación. Es decir, aquellas personas que generen al menos un salario mínimo mensual en la Ciudad de México —equivalente a 8,480.17 pesos— y laboren más de 288 horas al año, deberán reconocerse como trabajadoras formales, con derecho a seguridad social y prestaciones mínimas de ley.
Obligaciones para las plataformas digitales
De acuerdo con las reglas aprobadas, las plataformas deberán registrarse ante el IMSS como patrones, contar con un número patronal nacional o por delegación y dar de alta a sus trabajadores desde el primer momento en que se vinculan con la app. También deberán reportar riesgos de trabajo, movimientos salariales, bajas, y pagar las cuotas obrero patronales a más tardar el día 17 del mes inmediato posterior al de aseguramiento.
Las cuotas se calcularán con base en el ingreso neto mensual dividido entre los días del mes. Además, se establece que si un trabajador digital sufre un accidente sin haber generado ingresos mínimos en el mes, la empresa aún deberá cubrir su aseguramiento durante la incapacidad.
En materia de riesgos de trabajo, las plataformas serán clasificadas como parte del sector “Transporte de pasajeros” o “Servicios con transporte de agencias de gestión aduanal, de mensajería y paquetería, de equipajes, viajes, turísticas y otras actividades relacionadas con los transportes en general”, lo que implica una prima de riesgo Clase IV. Las plataformas que no pertenezcan a este sector deberán autoclasificarse conforme a su actividad real.
Esta clasificación se revisará anualmente conforme a la siniestralidad reportada en el registro patronal.
Trabajadores independientes
Los trabajadores que hayan recibido prestaciones sin estar debidamente registrados deberán pagar cuotas retroactivas como trabajadores independientes. De lo contrario, el IMSS podrá cobrar los servicios prestados como atención a no derechohabientes, e incluso solicitar reembolsos al IMSS-Bienestar cuando aplique.
La incorporación al régimen obligatorio no afecta a quienes ya reciben una pensión del IMSS. Asimismo, los trabajadores que no alcancen los ingresos mínimos mensuales podrán afiliarse de forma voluntaria como independientes, cubriendo cuotas sobre la base del salario mínimo.
Implementación definitiva
La prueba piloto tendrá una duración de 180 días naturales, durante los cuales el IMSS recopilará información y resultados. A partir de esa evaluación, se prepararán propuestas más detalladas que serán presentadas al Poder Legislativo para su posible incorporación definitiva en la ley.
El IMSS, en conjunto con la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, podrá realizar verificaciones y compartir información para asegurar el cumplimiento de estas reglas.
Esto ocurre luego de que la semana pasada, conductores y repartidores de aplicaciones como Uber, Rappi y DiDi se manifestaran en las calles, preocupados por el impacto que la medida podría tener en sus ingresos y autonomía laboral. Los manifestantes reconocieron el valor de ser considerados legalmente, pero insistieron en que no debe sacrificarse la flexibilidad que caracteriza su modelo laboral.
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