El canal oficial del Vaticano informó que el funeral del papa Francisco se llevará a cabo este sábado 26 de abril en la Plaza de San Pedro, de acuerdo con lo decidido por los cardenales católicos romanos, y se prevé que a la ceremonia solemne acudan líderes de todo el mundo.
El sumo pontífice falleció la madrugada de este lunes a los 88 años tras sufrir un derrame cerebral y un paro cardíaco, con lo que concluye una era turbulenta dentro de la Iglesia católica, ya que el sacerdote de origen argentino tuvo que enfrentar a la cúpula más tradicionalista dentro de la institución, a la vez que volvió a centrarla en los pobres y marginados.
El papa mostró un deterioro en su salud a principios de año, lo que lo llevó a pasar cinco semanas en el hospital por una neumonía doble y parecía estar recuperándose lentamente, pero su deceso se dio de manera rápida y sin sufrimiento, según el Vaticano.
La Santa Sede ya difundió fotografías de Francisco acostado en un ataúd abierto colocado en la capilla de la residencia de Santa Marta, donde vivió durante sus 12 años de papado. A ambos lados del ataúd había guardias suizos mientras dignatarios, entre ellos el presidente italiano Sergio Mattarella, rendían homenaje.
El cuerpo del primer papa latinoamericano será trasladado a la Basílica de San Pedro el miércoles en una procesión encabezada por cardenales, y permanecerá allí hasta el viernes por la tarde. El funeral se celebrará a las 10:00 horas del sábado en la Plaza de San Pedro y será presidido por el cardenal Giovanni Battista Re, decano del Colegio Cardenalicio, de 91 años.
El papa Francisco y su legado progresista
El Papa Francisco heredó una Iglesia católica en desorden, lo que lo llevó a reformar la administración central del Vaticano para erradicar la corrupción y enfrentar el flagelo del abuso infantil dentro de las filas del sacerdocio, con resultados mixtos.
Durante su papado, Francisco a menudo chocó con los conservadores, que veían a un papa demasiado liberal y demasiado complaciente con los grupos minoritarios, como la comunidad LGBTQ.
Francisco nombró a casi el 80% de los cardenales electores que elegirán al próximo papa, lo que aumenta las posibilidades de que su sucesor continúe con sus políticas progresistas, aunque al momento no existe un favorito para ocupar el cargo de jefe de la Iglesia católica.
El papa latinoamericano también tomó la decisión de nombrar cardenales para regiones remotas donde los católicos romanos constituyen una pequeña minoría o donde la Iglesia está creciendo más rápido; sin embargo, Europa sigue contando con la mayor proporción de cardenales electores, con el 39%, seguido de Asia y Oceanía, con alrededor del 20%.
Con información de Reuters
Te puede interesar: