El fabricante de automóviles Volvo Cars ha dejado la puerta abierta para trasladar parte de su producción a Estados Unidos y así evitar el cobro de aranceles con los cuales ha amenazado el presidente Donald Trump; sin embargo, mantendrá sus planes de exportar su modelo SUV EX30 de fabricación europea a la Unión Americana para finales de año.
Durante 2024 la compañía con sede en Suecia ya se había visto obligada a mudar la producción de sus vehículos eléctricos EX30 de China a Europa con el fin de evitar el cobro de gravámenes por parte de la Unión Europea.
El CEO de la automotriz, Jim Rowan, señaló que la producción del SUV EX30 en Europa comenzará este trimestre con el objetivo de cubrir el mercado europeo y el estadounidense durante la segunda mitad de 2025.
Actualmente, las exportaciones de autos de Europa a Estados Unidos están sujetas a un arancel de 2.5%; sin embargo, es probable que eso cambie. Rowan señaló que si las sanciones son de 10% podrán soportarlo, pero si alcanzan 25% será mucho más complicado.
Volvo, con opciones en EU
El CEO de Volvo señaló que la compañía cuenta con instalaciones fabriles que le permitirán trasladar una mayor parte de su producción a Estados Unidos si las sanciones por parte de Trump llegan.
Tenemos muchas opciones… sólo tenemos que tomar una decisión definitiva sobre qué modelos y qué plataformas trasladaríamos. Tendríamos que esperar a ver las cotizaciones arancelarias y entonces eso nos ayudaría a tomar esa decisión
añadió el directivo.
La empresa sueca, propiedad mayoritariamente de la china Geely, presentó el ES90, un nuevo sedán totalmente eléctrico. La firma tiene como objetivo sustituir la mayoría de sus vehículos con motor de combustión por unidades totalmente eléctricas para 2030.
Con información de Reuters
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