Petróleos Mexicanos (Pemex) será el encargado de establecer un precio mayorista nacional en terminales de almacenamiento y distribución, con el objetivo de que el costo por litro de gasolina regular no supere los 24 pesos, de acuerdo con un documento filtrado al que tuvo acceso EL CEO sobre un posible acuerdo alcanzado con el sector gasolinero para fijar un tope de precios.
Antes de que la presidenta Claudia Sheinbaum firme con el sector privado el acuerdo nacional para la regulación de los precios de la gasolina regular y el diésel, circuló un documento entre actores del sector energético que detalla 11 puntos clave de la estrategia.
Entre estos lineamientos, se establece que Pemex “instrumentará, en terminales de almacenamiento y distribución, un precio mayorista nacional para la gasolina regular que permita el cumplimiento del objetivo”.
Es decir, la petrolera fijará un precio de referencia en sus terminales con la intención de que el litro de gasolina regular, con octanaje menor a 91, no rebase los 24 pesos en las estaciones de servicio.
¿Aplica en todo el país?
El documento aclara que dicha medida no será aplicable en las estaciones de servicio ubicadas en las fronteras sur y norte (las que están en las zonas libres económicas), donde existen estímulos fiscales y una estructura de costos diferenciada que ya permite precios más bajos.
Además, Pemex implementará acciones para mejorar la distribución de última milla y garantizar el abasto en todas las regiones del país.
También revisará los casos en los que los costos logísticos u otras variables impidan que el diferencial razonable sea suficiente para cubrir costos operativos y la recuperación de inversión.
El acuerdo, además, señala que “Pemex y los otros importadores (…) se comprometen a revisar sus políticas de comercialización de combustibles a los diferentes permisionarios de expendio o de prestación del servicio de transporte, según corresponda”.
Estas empresas deberán tomar medidas para trasladar los beneficios del precio mayorista nacional a los consumidores finales. Para ello, se estipula un diferencial razonable que no deberá exceder los dos pesos por litro, sin incluir el Impuesto al Valor Agregado (IVA), respecto a los precios de mayoreo de Pemex y otros comercializadores.
Por su parte, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) continuará aplicando estímulos fiscales a través del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) para suavizar las variaciones en el precio final de venta, provocadas por fluctuaciones en los precios internacionales de referencia.
Que Pemex tome el control genera menor efectividad
Una fuente del sector energético, que solicitó el anonimato, señaló que la medida recae en los mayoristas (comercializadores y distribuidores) y no en las estaciones de servicio, lo que genera menor efectividad en los márgenes, ya que son empresas diferentes.
En sí, podría reducir la efectividad del tope de precios, ya que los márgenes de ganancia y los costos operativos varían entre empresas que pertenecen a diferentes eslabones de la cadena de suministro.
Profeco asume un rol clave en la supervisión de precios
Con la firma del acuerdo, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), que ya monitoreaba los precios mediante el programa Quién es Quién en los Precios, asumirá un papel más relevante en la vigilancia del sector gasolinero.
Además de continuar con la publicación de reportes semanales sobre precios, realizará inspecciones para verificar la calidad y legalidad del origen de los combustibles vendidos en estaciones de servicio.
Adicionalmente, debe establecer mecanismos de información semanal para dar a conocer a la población el precio de venta de los combustibles
señala el documento filtrado.
Por otro lado, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y el organismo que sustituya a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) reforzarán la supervisión de los controles volumétricos de combustibles y realizarán auditorías periódicas.
Cuestionamientos a nuevas facultades de Pemex
La fuente anónima consultada por EL CEO cuestionó el papel de Profeco en la supervisión del mercado de combustibles, señalando que la CRE debería ser la encargada del monitoreo de precios y costos operativos.
Es interesante observar este protagonismo de Profeco sobre la CRE y Cofece en el monitoreo de precios y costos de operación. Desde la semana pasada, la CRE ha estado pidiendo información sobre costos de operación a las estaciones de servicio y, en teoría, de acuerdo con el marco legal, debería ser la encargada de este monitoreo
comentó.
Además, el hecho de que apenas se esté solicitando dicha información muestra la falta de coordinación en la elaboración del acuerdo con el sector gasolinero y el gobierno de Sheinbaum.
Se establece un margen de dos pesos para las estaciones cuando aún no se ha realizado un análisis detallado sobre su viabilidad
explicó la fuente.
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