El consumo de los hogares, medido a través de las ventas del comercio minorista, “decepcionó” durante noviembre pasado, al caer por sexto mes consecutivo; El Buen Fin y otras campañas afines resultaron insuficientes para elevar el gasto de las familias mexicanas.
De acuerdo con datos desestacionalizados del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), los ingresos por suministros de bienes y servicios del comercio al por menor disminuyeron 2.2% a tasa anual en el penúltimo mes de 2024.
Esta caída anual representó la sexta baja consecutiva de las ventas de los establecimientos dedicados al comercio minorista, así como el peor resultado en los últimos 46 meses.
El retroceso mensual del comercio minorista fue congruente con la disminución mensual en el índice de confianza de los consumidores (-1.6 puntos), así como con el rebote en la tasa de desempleo. Ello pudo opacar los efectos favorables de una moderación en la inflación al consumidor (4.55% anual) y del fuerte incremento de las remesas en pesos (29.6% anual)
detalla un reporte de Ve por Más (BX+).
Fotoarte: Natalia Montiel
Consumo por giros de venta
De los 22 giros de los negocios minoristas considerados por el INEGI, 10 mostraron descensos anuales en sus ventas en el periodo de referencia, destacando con el retroceso más pronunciado el correspondiente a artículos para el esparcimiento (15.8%).
Otras bajas importantes se observaron en tiendas departamentales; artículos para el cuidado de la salud; productos textiles, excepto ropa, y artículos de ferretería, tlapalería y vidrios.
Mientras los mayores incrementos se dieron en los establecimientos dedicados a la venta de motocicletas y otros vehículos de motor; artículos para la decoración de interiores, y mascotas, regalos, artículos religiosos, desechables, artesanías y otros artículos de uso personal.
Segunda baja al hilo del comercio minorista
A tasa mensual, el comercio minorista cayó 0.07% en noviembre pasado, siendo la segunda baja al hilo, profundizando las señales de fragilidad para el consumo de corto plazo.
Los efectos del Buen Fin fueron mínimos para el rubro de las tiendas departamentales. Sin embargo, para el rubro de automóviles y camionetas conservaron un sólido desempeño. Ante la mixta lectura y considerando que el indicador se mantiene en terreno negativo por sexto mes consecutivo, se extienden las presiones a la cartera de las familias mexicanas
destacan analistas de Monex.
Para las cifras de cierre de 2024, consideran que los elementos clave que podrían impulsar el indicador son: las ventas decembrinas y principalmente la desaceleración en la inflación de diciembre.
Los especialistas de BX+ señalan que si bien al cierre de 2024 e inicios de 2025 el comercio aún podría encontrar cierto soporte en los bajos niveles de desocupación y el crecimiento de salarios, existes varios factores en contra:
- Moderación en la generación de empleos formales
- Menores niveles de confianza del consumidor apuntan hacia un gasto más defensivo por parte de los hogares
- Tanto la inflación como las tasas de interés permanecerán relativamente elevadas, lo que seguirá erosionando el poder adquisitivo de los hogares y restringiendo el acceso al financiamiento
- Si el mercado laboral llegara a enfriarse con claridad y/o se materializa una política migratoria más estricta en Estados Unidos, podría esperarse un menor dinamismo en las remesas
