Volkswagen enfrenta una caída significativa en sus utilidades y ventas durante el tercer trimestre de 2024, con un desplome del 42% en su beneficio operativo, que se situó en 2,860 millones de euros (mde), mientras que los ingresos por ventas cayeron un 0.5% interanual a alrededor de 78,500 mde.

Este descenso se produce en un entorno de mayores costos fijos y una reestructuración interna, factores que han afectado también la liquidez del fabricante de automóviles, situándose en un déficit de 160,600 mde a finales de septiembre, comparado con los 147,400 mde del mismo periodo del año anterior.

Pese a que las ventas de vehículos disminuyeron un 8.3% en comparación con el mismo periodo del año anterior, la compañía tuvo un repunte del 1.47% en el precio de sus acciones tras el anuncio (Ciudad de México 8:25 horas), según datos de Investing. 

Arno Antlitz, director financiero y director de operaciones del Grupo Volkswagen, dijo que el desempeño del trimestre reflejó un “entorno de mercado desafiante” y destacó la importancia de los programas de desempeño continuos en toda la compañía.

Volkswagen busca salir del ‘bache’

Los resultados del tercer trimestre se conocen después de que Volkswagen redujera en septiembre sus previsiones anuales para 2024 por segunda vez en apenas unos meses. En aquel momento la compañía dijo que esperaba un margen de beneficio de 5.6% y una baja de ventas del 0.7%, manteniendo estas proyecciones. Esas cifras se mantuvieron sin cambios en el informe de este miércoles.

El fabricante de automóviles alemán también enfrenta retos internos como el riesgo de cierres de plantas y el posible fin de su acuerdo de protección laboral en Alemania, vigente desde 1994. 

Ante la situación, el negociador jefe del fabricante de automóviles, Arne Meiswinkel, destacó la urgencia de reducir costos laborales para asegurar la viabilidad de la compañía en medio de un mercado automotriz europeo desafiante.  

Con información de CNBC

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