A pesar de los millonarios acuerdos alcanzados y los compromisos sellados entre empresas y el gobierno durante el CEO Dialogue, lo cierto es que las imágenes de los trabajadores del Poder Judicial alzando sus voces en medio de la celebración quedaron grabadas.

Las tensiones provocadas por la reforma al Poder Judicial fueron evidentes, marcando un contraste con el ambiente de celebración empresarial. El evento experimentó un cambio de sede. Los empresarios iniciaron sus reuniones en las oficinas de la Asociación de Bancos de México (ABM), ubicadas en el corazón del Centro Histórico, en la calle 16 de septiembre.

Sin embargo, los trabajadores del Poder Judicial, molestos por una reforma que perciben como una amenaza a su autonomía y derechos laborales, se hicieron presentes en la sede de la ABM. 

Sus demandas eran claras y dirigidas: la reforma judicial impulsada por Andrés Manuel López Obrador y Claudia Sheinbaum representa, para ellos, un retroceso en derechos y garantías fundamentales.

Las pancartas, redactadas en inglés, captaron la atención del público internacional presente en el evento, revelando el malestar que genera esta reforma tanto dentro como fuera de México.

Al segundo día, la estrategia cambió. El Palacio Nacional, con su imagen de control y seguridad, fue el nuevo escenario elegido para continuar las reuniones.

No fue una simple decisión logística. A pesar de los esfuerzos por mantener el cambio en discreción, los manifestantes lograron enterarse. La pregunta que comenzó a circular entre los asistentes fue inevitable: ¿quién filtró la información sobre la nueva sede?

Este cambio de sede no solo respondió a las protestas, sino también a preocupaciones sobre seguridad y acceso. La ABM, ubicada en pleno centro histórico, representaba un punto vulnerable en términos logísticos y de control de multitudes.

Lo que debía ser un triunfo indiscutible para el gobierno de Sheinbaum terminó por convertirse en un escenario donde el descontento social y las críticas a la reforma judicial encontraron su espacio. 

¿Dónde está  Luz Elena González Escobar?

La ausencia de Luz Elena González Escobar, secretaria de Energía, en eventos clave del sector energético ha generado una ola creciente de preguntas.

El 14 Congreso Conjunto de Asociaciones de Energía, que se llevará a cabo los días 16 y 17 de octubre, es el escenario más reciente en el que su cancelación ha sido interpretada como un gesto preocupante.

Luz Elena González, quien tendría la oportunidad de detallar las políticas energéticas del gobierno y despejar las dudas sobre la dirección que tomará el sector, ha decidido no participar.

En su lugar, será Altagracia Gómez Sierra, coordinadora del Consejo Asesor de Desarrollo Económico Regional y Relocalización de Empresas, quien intervendrá. 

Aunque Gómez Sierra es una figura relevante en el contexto económico, su presencia no satisface las expectativas de los principales inversores y expertos del sector energético, quienes esperaban una intervención directa de la secretaria, esto previo a la presentación del plan nacional de energía.

Lo que agrava la situación es la comparación inevitable con otros altos funcionarios que, en contraste, se han mostrado más proactivos en el diálogo público sobre sus respectivas áreas. 

Marcelo Ebrard, secretario de Economía, ha sido un ejemplo de apertura y participación, como lo demostró en su intervención en el Foro Bloomberg NEF. 

Su presencia en eventos internacionales refuerza la percepción de que en el sector económico, las preocupaciones de los inversores y el diálogo sobre la política pública reciben mayor atención y transparencia.

Otro año del gobierno de Evelyn Salgado

El gobierno de Evelyn Salgado cumplió años. Ha sido un gobierno diferente en muchos sentidos, tanto por ser la primera mujer que gobierna Guerrero, como por el apoyo con que ha contado del gobierno federal para salir adelante de los desastres naturales que han golpeado la entidad.

La morenista, a la par de atender a las zonas que fueron afectadas por los huracanes Otis y John, ha impulsado programas como el Plan de Justicia y Desarrollo de la Nación Amuzga, que se implementó en 2023 beneficiando a 8,165 personas indígenas, sector de la población que se encontraba completamente en el olvido.

Ademas, con el Programa de Apoyo a la Educación Indígena hizo una inversión de 1.2 millones de pesos en mantenimiento escolar, lo que benefició a 128 familias, y también se apoyaron ocho proyectos económicos por un monto de 4.5 millones de pesos, con los cuales se apoyaron a 630 productores.

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