La transición del gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo debe contemplar las necesidades impuestas por el auge de los vehículos eléctricos, la transformación industrial, los centros de datos y que las proyecciones de crecimiento económico podrían superar el 2.5% anual, consideró la Comisión de Energía de la International Chamber of Commerce México (ICC México).
En un análisis el organismo empresarial enfatizó la importancia de desarrollar un paquete de propuestas que no solo apunte a la transición energética, sino también a las expectativas de demanda.
El estudio advierte sobre la necesidad de ir más allá de las problemáticas recurrentes, que se han limitado históricamente a los aspectos regulatorios y a la inversión en líneas de transmisión.
Entre los hallazgos del análisis está que en el último verano la demanda eléctrica máxima en el país superó los 52,000 MW, satisfecha en parte por 42,000 MW de energía convencional y 10,000 MW de fuentes limpias.
Sin embargo, la capacidad de las energías limpias para contribuir durante las horas críticas, como el atardecer, fue notablemente insuficiente.
De los 31,000 MW de energías limpias instaladas en México, solo 10,000 MW están disponibles en los momentos de mayor demanda, lo que pone de relieve la fragilidad del sistema energético actual ante un panorama de creciente consumo asociado a los nuevos centros de datos y la electrificación del transporte.
Una de las cuestiones más críticas discutidas es la proyección de satisfacer una demanda eléctrica que podría alcanzar los 100,000 MW para 2050 y que puede ser mayor con la llegada de las nuevas tecnologías.
Para lograr un sistema totalmente limpio, se estima que México deberá incrementar su capacidad de generación limpia de 10,000 MW a 100,000 MW en los próximos 25 años.
Esto no solo implica una inversión significativa, sino también una visión estratégica que contemple cómo movilizar recursos y tecnologías adecuadas,
mencionó el estudio.
Propuestas del ICC México para Claudia Sheinbaum
Además de la inversión necesaria para agregar 30,000 MW adicionales, el análisis identifica tres vías estratégicas para la descarbonización del sistema eléctrico mexicano y que puede ejecutar el gobierno de Claudia Sheinbaum.
La primera es la eficiencia energética, que podría permitir una reducción de 20,000 MW en la demanda del Sistema Eléctrico Nacional. De este modo, en lugar de requerir 100,000 MW, el país podría reducir su necesidad a 80,000 MW.
La segunda vía es la generación masiva de energía solar durante el día, con un enfoque en el almacenamiento.
Mediante el uso de baterías, plantas de hidroeléctricas autónomas con rebombeo o la producción de hidrógeno verde, se podría aportar aproximadamente 22,000 MW en las horas de mayor demanda, particularmente después de las 7 de la tarde, cuando la presión sobre la red es más intensa.
Por último, se destaca la promoción de tecnologías para la captura, transporte y almacenamiento de dióxido de carbono como una opción crucial.
Hay que ver la viabilidad de inyectar el dióxido de carbono en pozos vacíos de gas natural o reformar la infraestructura existente para optimizar el aprovechamiento de los recursos disponibles, así como la exploración de proyectos de expansión de bosques.
Estas acciones podrían compensar emisiones equivalentes a 18,000 MW de generación a partir de hidrocarburos. La ICC insistió en que la capacidad del nuevo gobierno para implementar estas propuestas será determinante para responder a las crecientes demandas del país.
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