Contra todo pronóstico, la economía de Estados Unidos creó 2.5 millones de empleos durante mayo y la tasa de desempleo bajó a 13.3%.

En marzo y abril más de 21 millones de puestos de trabajos desaparecieron llevando la tasa de desempleo hasta un 14.7%.

Tras la publicación, el presidente Donald Trump celebró la creación de plazas laborales en un contexto de crisis económica derivada de la pandemia de COVID-19.

Economistas encuestados por Refinitiv esperaban la pérdida de 8 millones de empleos en mayo, lo que elevaría a 28 millones de plazas eliminadas en tres meses.

Esta mejora en el mercado laboral refleja una reanudación limitada de la actividad económica que había sido reducida en marzo y en abril por la pandemia del coronavirus (COVID-19) y los esfuerzos por contenerla,

indicó la Oficina de Estadísticas de Empleo. 

Los datos de las nóminas del sector privado y las peticiones semanales de ayuda por desempleo muestran que el paquete de ayuda y la reapertura parcial en algunos estados desaceleraron la destrucción de empleo y permitieron que algunas personas recuperaran sus puestos de trabajo.

Mickey Levy de Berenberg Capital Markets advirtió que una recuperación inicial de la economía puede ser de corto aliento.

“A medida que la economía vuelve a abrir, el empleo va a subir inicialmente a medida que las empresas vuelven a contratar a trabajadores despedidos o colocados en permiso sin sueldo, pero va tardar años en que se vuelva a los niveles de antes de la crisis”, explicó Levy en un análisis citado por la AFP.

Con información de AFP